Ruta: PR-CU 37 Circular Laguna de Uña por El Escalerón y La Raya, Serranía de Cuenca.
Recorrido: 11 km
Tiempo: 3:40
Desnivel: +250 m
Fecha: Octubre 2.024
Se trata de una ruta circular que se inicia en la localidad de Uña, en el aparcamiento que hay junto a la laguna. Aún en carretera cerca de Uña vemos este zorro a un lado de la carretera.
Desde el mismo aparcamiento vemos indicaciones del inicio de sendero PR-CU 37, echando a andar con la laguna a nuestra izquierda.
No llevamos mucho recorrido cuando alcanzamos el Mirador de la Laguna de Uña.
Como es temprano, vemos como el sol empuja a las nieblas mañaneras que se van elevando poco a poco.
Continuamos por la misma carretera asfaltada que traemos desde el pueblo, pasando por el Centro de Interpretación del Parque Natural de la Serranía de Cuenca que hoy se encuentra cerrado
y posteriormente por el Mirador de Uña, muy concurrido porque coincidimos con un grupo que ha llegado en autobús, así que dejamos parte de la visita para el final.
Fuente de la Canaleja. Son varias las fuentes que nos vamos a encontrar por el camino.
Unos metros más adelante, abandonamos la carretera para iniciar la subida al Escalerón
por una senda que se inicia a nuestra derecha.
La Muela de la Madera desde aquí se ve impresionante. Por su base discurre La Raya.
La subida por El Escalerón es lo más "duro" de la ruta, pues es cuando ganamos la mayor altura, aunque de forma cómoda.
Pasamos por dos fuentes con troncos de árbol.
En la zona alta las rocas adquieren formas curiosas.
Arco natural.
Llegamos arriba.
Vistas hacia Uña y su laguna. Al fondo la loma donde se sitúa la Ciudad Encantada.
Por aquí el camino es amplio y con poco desnivel, por lo que resulta muy cómodo.
Nos acercamos hasta un balcón natural desde donde contemplamos las instalaciones de la Piscifactoría de Uña.
Poco después llegamos al Mirador de El Refrentón, con más o menos las mismas vistas.
Continuamos por la pista forestal que ahora se interna en un bosque,
donde impera el pino laricio.
Llegando al Puntal de la Tola,
otro mirador natural, donde decenas de buitres leonados, vuelan por encima de nuestras cabezas.
Aunque nos hemos cruzado con poca gente, la ruta del Escalerón y La Raya es una de las más conocidas y por tanto visitadas de toda la Serranía de Cuenca.
Llegamos al Mirador Rincón de Uña,
desde donde volvemos a disfrutar de las vistas a Uña
y su laguna.
Por esta zona, el grupo de buitres leonados es más numeroso.
La Laguna de Uña es de origen natural, aunque la laguna actual es tres veces mayor que la original pues fue ampliada artificialmente en 1925 para poder abastecer el salto hidroeléctrico de Villalba de la Sierra.
Llegamos al cruce con el Camino de la Raya.
Nos introducimos en un estrecho callejón
encajonado entre paredes de roca,
que desemboca en La Raya.
Para nosotros lo más espectacular de la ruta, que en parte nos recuerda a las fajas de Ordesa.
La laguna se ve ya más cerca.
Se trata de un pasillo aéreo, producto de la erosión, con una anchura suficiente para poder recorrerla de forma segura,
con una altitud constante y de una longitud suficiente, para que desde la lejanía se observe como una raya horizontal.
La Raya constituía una vía importante de comunicación entre las poblaciones de Las Majada y Uña.
Pasamos de largo el cruce con la senda que desciende hacia la laguna por donde continúa nuestra ruta, con la intención de recorrer toda la raya.
Llegados al final, volvemos por nuestros pasos hasta el cruce,
desde donde iniciamos la bajada hacia la laguna.
El sendero en un principio tiene bastante pendiente, que poco a poco se irá suavizando.
Vistas hacia la Raya.
Llegamos a la altura de la laguna,
que rodeamos, pasando por un antiguo transformador adecuado para proporcionar lugar de reproducción a distintas aves.
Cercanos a Uña pasamos por las instalaciones de su Central Hidroeléctrica.
Llegados al pueblo dejamos la mochilas en el coche y comemos en el Restaurante La Laguna, uno de los dos que hay junto al aparcamiento.
Finalizada la comida damos un paseo hasta los miradores,
que ahora visitamos en solitario.
La vuelta la hacemos por la parte alta del pueblo.
Nos vemos en las Montañas
