Ruta: Tbilisi - Mtskheta. Monasterio de Samtavro, Catedral de Svetitskhoveli y Monasterio de Jvari. República de Georgia
Fecha: Octubre 2.017
Mtskheta, antigua capital del Reino de Georgia, se encuentra a unos 20 km de Tbilisi. De las opciones que tenemos para llegar hasta allí, hemos optado por tomar un marshrutka, transporte público que viene a ser como un taxi colectivo, muy habitual en las antiguas repúblicas soviéticas. Tomamos el metro en Rustaveli para dirigirnos a Didube, donde se encuentra la estación de autobuses.
En una plaza junto al metro encontramos la estatua de Shota Rustaveli, poeta del siglo XII originario de Georgia, considerado como uno de los más grandes exponentes de la literatura medieval.
Llegamos a la caótica estación de Didube, donde preguntando por Mtskheta logramos llegar a una taquilla donde compramos los billetes, subiéndonos a un marshrutka que no tarda mucho en partir.
Mtskheta, en la confluencia de los ríos Mtkvari y Aragvi es una ciudad-museo de Georgia y una de las más antiguas del país, siendo capital del Reino de Georgia durante ocho siglos (Del III a.C al V d.C). Mtskheta fue el lugar en el que fue aceptado el cristianismo en Georgia tras la llegada de Santa Nino, declarándose como religión oficial de todo el Reino por el monarca Mirian III en el año 337 y aún es sede de la Iglesia ortodoxa y apostólica georgiana. Además de pasear por sus calles y por el animado mercadillo en la cercanía de la Catedral, visitaremos 3 templos religiosos que la UNESCO declaró en 1994 Patrimonio de la Humanidad y que son de imprescindible visita en Mtskheta:
Monasterio de Samtavro
Complejo arquitectónico ortodoxo. Dentro del recinto están la iglesia de la Transfiguración y el convento de Santa Nino. Se dice que la iglesia se elevó en el lugar donde Santa Nino se había detenido para orar.
Fue construida en el s. IV, poco después de la muerte de la Santa, por el Rey Mirian III de Iberia (o Iveria) y su esposa, Nana. Ambos fueron bautizados y es cuando la religión cristiana se convirtió en la oficial del estado georgiano.
En su interior están las tumbas del Rey Mirian III y de su esposa. Tuvo múltiples renovaciones y hoy día es un pequeño monasterio con una pequeña capilla dedicada a la propia Santa Nino.
Tiene el campanario separado; clásico en la arquitectura religiosa de Georgia.
El recinto está amurallado por completo y es verdaderamente imponente. El campanario está situado formando parte de la misma muralla. Fue construida en el siglo XI, pero sobre los cimientos de una iglesia inicial, del siglo IV, que era de madera y databa de la época en que la antigua Iberia estableció el cristianismo como religión oficial del país.
El origen de la santidad del lugar se explica por una leyenda según la cual un judío del siglo I llamado Elioz regresó de una peregrinación a Jerusalén trayendo consigo la túnica sagrada que llevaba Cristo antes de la crucifixión. La hermana de este hombre, Sidonia, se emocionó tanto al ver la reliquia que se abrazó fuertemente a ella y murió. Fue imposible arrancar la túnica de manos de la difunta, de modo que decidieron enterrarla tal como estaba y cuando el rey Mirian decidió construir la catedral en el lugar de la sepultura de Sidonia ya nadie se acordaba de su localización exacta. Plantaron un pilar de madera al azar y por la noche Santa Nino, que había conseguido la conversión de los reyes gracias a sus muchos milagros, realizó otro tras una noche de vigilia y oración: el pilar de madera se elevó y se puso en marcha hasta situarse en el punto deseado.
La iglesia actual es de piedra y data del siglo XI; sin duda es una de las más bellas y grandiosas de Georgia. Aquí fueron coronados no pocos reyes georgianos e incluso sirvió de mausoleo de muchos de ellos. Hoy este templo es uno de los más imponentes y extraordinarios de Georgia, con unos frescos maravillosos en muros (en el altar hay una enorme pintura de Jesús tipo pantocrátor).
El tercero de los templos religiosos es el Monasterio de Jvari que se sitúa en una colina,
pero antes de visitarlo, pararemos a comer algunos platos típicos de Georgia, como el Adjarian Khachapuri, pan de queso georgiano con huevo crudo,
o el Lobio, plato tradicional de judías servido en recipiente de barro.
Finalizado el almuerzo nos toca negociar con varios taxistas la subida hasta el monasterio. Esto de negociar con los taxistas resulta pesado pero es la manera que tienen en Georgia de contratar un viaje en taxi.
Monasterio de Jvari “La Cruz”
Situado en una colina a la que sólo se puede subir o bien por un sendero largo y con poca sombra o por carretera en taxi; cuesta alrededor de 15 laris el viaje.
Según la tradición, Santa Nino erigió una gran cruz de madera en este lugar, donde antes había un templo pagano. Dicen, que esta cruz era capaz de hacer milagros, por lo que atraía peregrinos de todo el Cáucaso.
Existen bajorrelieves e inscripciones en el alfabeto georgiano por toda la iglesia.
Las vistas son impresionantes no sólo sobre el valle sino que alcanzan a los picos nevados de Kazbegi, otro de los atractivos turísticos de Georgia.
Imagen de Mtskheta junto a la unión de los ríos Mtkvari y Aragvi.
Catedral de Svetitskhoveli
Monasterio de Samtavro.
Acabada la visita, iniciamos el regreso hacia Tbilisi siguiendo el mismo proceso pero en sentido inverso, primero con el taxi que nos espera en el parking del Monasterio de Jvari.
posteriormente el marshrutka hasta Didube, para finalizar con el metro hasta Rustaveli.
Nos vemos en las Montañas